Tal vez no fue un sueño

Una de las cosas que mas me fascina de mi mujer es la capacidad que tiene para sorprenderme. Siempre estoy deseando llegar a casa para ver con que travesura me sorprenderá esta vez y hoy, como no podía ser de otra manera, me sorprendió.


Al llegar a casa abrí la puerta con sigilo y me la encontré casi desnuda tumbada en el sofá acariciando su cuerpo, sus tetas, su coño… estaba medio dormida, como si estuviera teniendo un sueño erótico que le estaba dando mucho placer y la verdad, con solo mirarla, a mi también. Llevaba puesto un pequeño vestido de rejilla que dejaba ver sus hermosas tetas y sus preciosos pezones y mientras se acariciaba los pezones con una mano también jugaba con su clítoris con la otra. Yo la deje hacer, no hacia ruido para no despertarla y que no se percatase de mi presencia. Me quité el pantalón y empecé a masturbarme mientras veía como disfrutaba mi mujer.

Ella suspiraba y jadeaba, apretaba sus pezones con fuerza, no sé cuánto tiempo estaba tocándose, pero parecía estar a punto de correrse y así fue, tuvo un orgasmo muy intenso, sus pezones se pusieron erectos y su cuerpo se arqueó. Yo tenía la polla durísima al ver a mi mujer tan caliente, tan bonita, tan sexy… volvió a quedarse dormida a los pocos segundos cosa que aproveche para acercarme a ella sigilosamente, acariciar sus tetas, darle un beso en los labios… pero vi que seguía dormida… el orgasmo parecía que había hecho que se quedara dormida muy profundamente, pero… yo también quiera jugar.


Puse suavemente mi polla dura en sus labios y a los pocos segundos empezó a darle pequeños besos, sin abrir los ojos, sin despertarse, los besos pasaron a ser pequeñas lamidas y poco a poco se la fue metiendo en la boca al mismo tiempo que yo hacia pequeños movimientos de cadera para “follarle” la boca y ponía mi mano entre sus piernas para acariciar su clítoris… Ella parecía seguir disfrutando de ese sueño erótico y se dejaba hacer. Su coño estaba muy caliente y mojado, se estremecía y no tardó en volver a correrse lo que me puso muy cachondo y descargue mi leche en su boca… pensé que se despertaría al sentir toda la leche caliente entrando en su boca, chorreando por sus labios… pero no fue así, siguió chupando sin parar tragándose gran parte de mi corrida, fue impresionante…

Como ella parecía seguir dormida yo aproveche para ponerme los pantalones y salir de casa sigilosamente para volver a entrar 5 minutos después. Con el ruido de la puerta se despertó, se levantó del sofá y vino a recibirme con su vestidito de rejilla tan sexy, sus pezones duros y esa carita que pone cuando ha sido traviesa. Le di un beso en los labios notando que aun tenia parte de mi corrida en ellos, le pregunté cómo estaba y me dijo que estaba muy cachonda, que se había quedado dormida esperándome y había tenido un sueño muy caliente donde no paraba de follar y mamar. Mientras preparábamos la mesa para comer le dije que parecía muy interesante, que me fuera contando, pero hizo una pequeña pausa al tiempo que pasaba sus dedos por sus labios sintiendo lo que quedaba de mi corrida y me dijo… tal vez no fue un sueño… le sonreí, nos volvimos a besar muy apasionadamente y nos fuimos a la cama a seguir follando mientras me contaba en que había consistido ese sueño tan caliente que tuvo, pero su sueño os lo contaré en otro momento o tal vez lo cuente ella…

Escrito por: King

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi primera vez

Encuentro de Golosa y King